El autor escribe su experiencia en Sidi Ifni, lugar entrañable en otros tiempos, lleno de muchos e intensos recuerdos. Y lo hace, principalmente, después de haber oído a tanta gente hablar de la guerra de Sidi Ifni, muchas veces, sin tener idea del tema, sin haber conocido siquiera el lugar, aunque afirmen rotundamente que ellos estuvieron allí. La guerra que fue la experiencia más fuerte vivida, no le interesa tanto, como contar lo contrario, la paz. Dejar constancia que hubo un tiempo en que Sidi Ifni era un pacífico y tranquilo lugar, donde debido a su idiosincrasia, se vivía de modo diferente al resto de los españoles de entonces. Por ejemplo, la proximidad a las Canarias y a Marruecos, entonces bajo Protectorado español y francés, les permitió conocer antes que muchos compatriotas, el butano, las medias de nylon, las vajillas "duralex"...o la educación mixta, algo impensable todavía en el resto de España. La guerra apareció, para cambiar ese peculiar estilo de vida. Arguye D.Joaquín que es la guerra la que ha sitúado en el recuerdo de la gente, a Sidi Ifni. Aquella tragedia, dio a conocer aquel territorio. Sin la cual, pocos ubicarían siquiera, ese lugar que fue español desde 1500 hasta 1969. Aunque estas vivencias están plasmadas de forma novelada, salvo los nombres de algunos personajes, todo lo que afirma está escrito desde la lealtad con la verdad. El resto de nombres que salen a relucir, corresponden a personas y personajes que existieron, que son vistos desde la perspectiva de aquellos adolescentes momentos. "Personas, todas ellas, por las que guardo un recuerdo positivo y admirable. Y siento un gran cariño porque todos han formado parte de mi vida, como si fueran de mi familia".